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La eyaculación precoz es un problema que afecta a muchos hombres en todo el mundo y puede tener un impacto significativo en su vida sexual y su bienestar emocional. De hecho, es el problema sexual más frecuente en varones y afecta entre el 25% y el 40%.
Las causas pueden ser múltiples y, normalmente, la presión que ejerce el hombre sobre sí mismo, influye en el aspecto psicológico. Pero ¡a no desesperar!. Hay varias maneras de abordarlo disponibles y te las contamos en este blog.
¿Qué es la eyaculación precoz y por qué se produce?
La eyaculación precoz se define como la incapacidad de controlar la eyaculación de manera adecuada durante el acto sexual, lo que lleva a un orgasmo prematuro.
Durante la relación sexual, el hombre llega a la fase denominada “meseta” disfrutando de su placer hasta que, de manera voluntaria, llega el “climax”. El hombre con eyaculación precoz no puede “quedarse” en la fase de la “meseta”, sino que hay una excitación rápida, así como una eyaculación temprana e involuntaria.
La eyaculación precoz afecta negativamente a la calidad de la vida sexual de la persona que lo padece y de su pareja, no consiguiendo relaciones sexuales satisfactorias y generando un profundo malestar.
Los tipos de eyaculación precoz
Se distingue entre eyaculación precoz primaria y secundaria, dependiendo de si el hombre nunca ha tenido control sobre la eyaculación (primaria), o sí lo tuvo y lo perdió (secundaria).
Factores que influyen en la eyaculación precoz
Factores psicológicos: La ansiedad, el estrés, la depresión y los problemas de autoestima pueden jugar un papel importante en el desarrollo de la eyaculación precoz. Las preocupaciones relacionadas con el rendimiento sexual y el temor a defraudar a la pareja pueden desencadenar el problema.
Factores biológicos: Ciertos desequilibrios químicos en el cerebro y niveles hormonales anormales pueden estar asociados con la eyaculación precoz. Se cree que el neurotransmisor serotonina (5HT) tiene un papel esencial en la modulación de la eyaculación. Por lo tanto, se considera que los bajos niveles de serotonina podrían provocar la eyaculación precoz. Además, algunas afecciones médicas, como la prostatitis, pueden contribuir a este trastorno.
Hábitos de vida: El consumo excesivo de alcohol, el tabaquismo y el abuso de sustancias pueden afectar la función sexual y contribuir a la eyaculación precoz.
Opciones de tratamiento
Es importante recordar que la eyaculación precoz es tratable y que existen varias opciones disponibles para abordar este problema. Aquí hay algunas medidas que pueden ayudar:
Terapia psicológica: La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ser beneficiosa para abordar los factores psicológicos subyacentes que contribuyen a la eyaculación precoz. La terapia puede ayudar a reducir la ansiedad, mejorar la autoestima y enseñar técnicas para prolongar el acto sexual.
Terapia farmacológica: Hay productos como el Power Sex de Q77+ que han demostrado ser efectivos en el tratamiento de la eyaculación precoz. Estos comprimidos pueden ayudar a retrasar la eyaculación y mejorar el control sobre el orgasmo, al mismo tiempo que aumenta el deseo y la potencia de la erección.
Cambios en el estilo de vida: Adoptar un estilo de vida saludable, que incluya una dieta balanceada, ejercicio regular y reducción de hábitos nocivos, puede contribuir a mejorar la función sexual en general. Descubre además los mejores alimentos afrodisíacos para hombres en este blog.