Cuidados de la piel en los que vale la pena invertir

La belleza es un aspecto importante en la vida de muchas personas, ya que puede aumentar la autoestima y la confianza en uno mismo. Por esta razón, cuidar la piel se vuelve fundamental para lucir un aspecto radiante y saludable. 

 

En Q77 apostamos por los cuidados de belleza y bienestar, queremos que te sientas bien contigo misma siempre. Por ello, a lo largo de este post queremos darte algunos consejos básicos sobre los cuidados de la piel y hablarte de los productos donde vale la pena invertir. ¡Atenta!

Básicos para el cuidado de la piel

La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y es fundamental mantenerla cuidada para mantenerla saludable y lucir una apariencia radiante. Algunos productos en los que vale la pena invertir son: 

1. Protector solar 

El protector solar es un imprescindible, ya que protege la piel de los daños causados por los rayos UV. Invertir en un buen protector solar con alto factor de protección es clave para prevenir el envejecimiento prematuro y reducir el riesgo de cáncer de piel. 

Recuerda ponerte protector a diario antes de salir de casa y no olvides reaplicarlo varias veces durante el día, sobre todo si estás al aire libre. 

2. Hidratantes de calidad 

La hidratación es fundamental para mantener la piel suave, tersa y luminosa. Invertir en una buena crema hidratante adaptada a las necesidades de la piel puede marcar la diferencia en su apariencia.

3. Desde dentro

Una buena hidratación y nutrición para tu piel depende en gran medida de las reservas hídricas y nutrientes que recibe a través de una dieta equilibrada y saludable.

Puedes optimizarla con un complemento alimenticio específico, como por ejemplo de colágeno hidrolizado, que apoya la síntesis natural de colágeno y retrasar la aparición de arrugas y flacidez.

Cuidados de la piel facial

Sin duda, en el cuidado de la piel facial es donde solemos invertir más. El rostro es una de nuestras cartas de presentación más importantes y cuando la piel se ve fresca y luminosa, conseguimos la base perfecta para potenciar la belleza del rostro.

1. Limpieza

La limpieza es el primer paso para el cuidado de la piel del rostro y el más importante para que luzca saludable. Lo ideal es limpiarla dos veces al día, por la mañana y por la noche, tanto si te maquillas como si no.

Es esencial para eliminar células muertas, exceso de sebo e impurezas y las sustancias provenientes de la contaminación ambiental. Todo ello reforzará la barrera cutánea, la piel estará reluciente y evitarás irritaciones, granitos y manchas. 

Invierte en un buen limpiador que se adapte a las características de tu piel y sobre todo, asegúrate que sus ingredientes sean suaves y que limpien tu piel sin irritarla. 

2. Crema hidratante específica

Determina tu tipo de piel y las necesidades que tiene antes de elegir tu crema. Hay muchísimas opciones en el mercado para cada tipo de piel: hidratantes, nutritivas, antiarrugas, tensoras,… 

Busca ingredientes como ácido hialurónico, colágeno, ceramidas, antioxidantes como la vitamina C e ingredientes naturales como , por ejemplo, aloe vera, aceite de rosa mosqueta o de almendras y manteca de karité.

3. Tratamientos faciales

 

Los tratamientos faciales como las limpiezas profundas, las exfoliaciones y las mascarillas son importantes para mantener la piel limpia y libre de impurezas.

Por ello, invertir en tratamientos faciales de calidad puede mejorar la textura de la piel, reducir los poros dilatados y prevenir la aparición de imperfecciones.

Cuidados de la piel corporal

El cuidado del cuerpo es clave para lucir una piel suave en todo momento. Así que, apúntate estos cuidados básicos que te vamos a explicar a continuación:

1. Exfoliación corporal 

La exfoliación corporal es importante para eliminar las células muertas de la piel y estimular la renovación celular.

 

Por lo tanto, hazte una exfoliación suave una o dos veces por semana e invierte en un buen exfoliante corporal para suavizar la piel, prevenir la obstrucción de los poros y mejorar la textura de la dermis. 

2. Hidratación corporal

 

Al igual que en el rostro, la hidratación corporal es fundamental para mantener la piel suave, flexible y luminosa.

Para ello, aplica una crema hidratante diariamente para mantener la piel suave y flexible, y elige la crema adecuada a las necesidades de tu piel.

 

Invertir en una buena loción corporal o aceite hidratante es fundamental para nutrir la piel y prevenir la sequedad. 

3. Tratamientos corporales

 

Los tratamientos corporales como los masajes, las envolturas y las terapias de hidratación son importantes para relajar los músculos, mejorar la circulación sanguínea y tonificar la piel.

 

Invertir en tratamientos corporales de calidad puede ayudarte a sentirte más relajado, rejuvenecido y con una piel más suave. 

Cuidados del cuero cabelludo

El cabello es otro aspecto importante de nuestra apariencia y su cuidado debe empezar por la piel del cuero cabelludo; a veces no se le presta la atención que merece pero cuidarlo correctamente marca una gran diferencia. Algunos cuidados básicos en los que vale la pena invertir son:

1. Productos de buena calidad

 

Usar productos de buena calidad para el cuidado del cabello es fundamental para mantenerlo sano y brillante. Invierte en champús, acondicionadores, mascarillas y otros productos capilares que se adapten a las necesidades de tu cabello y que no contengan ingredientes dañinos para la piel del cuero cabelludo.

 

Evita tintes y decolorantes con químicos agresivos, ya que comprometen la salud del cuero cabelludo y resecan la fibra capilar. Si optas por teñir tu pelo, existen opciones veganas mucho más respetuosas con tu piel y cabello.

2. Tratamientos capilares específicos

 

Los tratamientos capilares como las hidrataciones, las keratinas y los tratamientos de reparación son importantes para mantener el cabello fuerte y saludable. Invertir en tratamientos capilares de vez en cuando puede prevenir la sequedad, la fragilidad y las puntas abiertas.

 

Es más, visita a tu peluquero con regularidad para que te haga un tratamiento de reparación e hidratación. De esta manera tu pelo siempre tendrá un aspecto brillante y cuidado. 

3. Otras recomendaciones

 

Cepilla el cabello suavemente para evitar la rotura y la debilitación de los folículos. Para ello utiliza un cepillo de cerdas naturales, empieza desenredando las puntas y sube poco a poco hacia la raíz.

 

Por otro lado, a la hora de lavarte el pelo es recomendable no hacerlo todos los días, ya que debilitas la barrera cutánea del cuero cabelludo y puede resecarse. Lo ideal es lavarlo entre 3 a 4 veces por semana, con un champú específico. Incluso puedes ir alternando 2 champús y tratar diferentes carencias al mismo tiempo. 

 

Por último, queremos destacar la importancia de proteger el cabello y el cuero cabelludo del sol, el cloro y el agua de mar. Para ello, no dudes en hacerte con un protector solar para el cabello y alíate con sombreros y pañuelos. 

Hábitos saludables para el cuidado de la piel

• Alimentación equilibrada: Una dieta rica en frutas, verduras, proteínas y grasas saludables es clave para mantener la piel, el cabello y las uñas saludables. 

• Descanso adecuado: Dormir lo suficiente es crucial para que la piel se regenere durante la noche y luzca radiante y descansada. 

• Bebe suficiente agua: Mantenerse bien hidratado es esencial para una piel luminosa y saludable. Bebe al menos 1 litro y medio de agua al día. 

• Ejercicio físico regular: La actividad física mejora la circulación sanguínea y oxigena las células de la piel, lo que contribuye a una apariencia más saludable.

• Evita el tabaco y el alcohol: Estas sustancias pueden dañar la salud de la piel y acelerar su envejecimiento. Redúcelas o elimínalas de tu vida diaria. 

• Visita a profesionales especializados: Acude regularmente a tu dermatólogo, nutricionista y esteticista para recibir consejos personalizados y tratamientos específicos para cuidar tu belleza de forma adecuada.

 

Cuidar la piel de cara y cuerpo, y el cuero cabelludo, es fundamental para mantenerla saludable y vital.. Invertir en productos y tratamientos de calidad puede marcar la diferencia en tu apariencia y en tu bienestar general.

 

Recuerda que cada persona es única, por lo que es importante encontrar los cuidados que mejor se adapten a tus necesidades y preferencias. ¡No dudes en invertir en ti mismo y en la salud de tu piel!