Alimentos diuréticos para tratar la retención de líquidos

La retención de líquidos es un problema común que afecta a muchas personas en todo el mundo, mayoritariamente mujeres. A menudo es incómoda y produce molestias en el día a día pero, en algunos casos, puede resultar ser un problema de salud más serio. 

Afortunadamente, existe una gran variedad de alimentos diuréticos que pueden ayudar a eliminar el exceso de agua en el cuerpo y aliviar los síntomas de la retención de líquidos. 

Pero, antes de explicarte qué tipo de alimentos diuréticos añadir a tu dieta, queremos explicarte qué es la retención de líquidos, sus causas y cuáles son sus síntomas.

¿Qué es la retención de líquidos?

La retención de líquidos, que se conoce en términos médicos como edema, es una hinchazón por exceso de líquido acumulado en los tejidos del cuerpo. Este líquido, compuesto principalmente por agua y sales, puede acumularse en diferentes partes del cuerpo, habitualmente en las piernas y los pies, pero también en abdomen, brazos, manos o incluso el rostro.  

Causas de la retención de líquidos

La retención de líquidos puede tener causas muy diversas. Algunas de ellas son consecuencia de las circunstancias o de la edad pero, en otras, el edema puede ser síntoma de una enfermedad grave.

1. Problemas de circulación. Una de las causas más comunes por la que aparece la retención de líquidos es la insuficiencia venosa, que provoca pesadez en las piernas, varices y edema, entre otros síntomas. Pasar demasiado tiempo de pie o muchas horas sentado, especialmente con las piernas cruzadas, dificulta aún más el retorno venoso.

2.Cambios hormonales. Las alteraciones propias del ciclo menstrual, los periodos de embarazo o menopausia, o alteraciones más importantes de la tiroides, suelen contribuir a la acumulación de líquido.

3.Estilo de vida sedentario. La inactividad continuada es un motivo habitual de la  aparición de problemas de salud. Contribuye, por ejemplo, al desarrollo de factores de riesgo como un aumento de peso, y está asociado a enfermedades cardiovasculares, entre otras, que pueden provocar retención de líquidos.

4.Sobrepeso. La obesidad genera problemas circulatorios y afecta al normal funcionamiento del sistema linfático, provocando habitualmente retención de líquidos.

5.Dieta con exceso de sal. El sodio (sal) atrae y retiene el agua de nuestro organismo, por lo que reduce la eliminación de líquidos. Además, la ingesta excesiva de sodio causa hipertensión arterial y altera el funcionamiento de los riñones, que no tienen capacidad para eliminarlo, lo cual puede dar lugar a una insuficiencia renal.

6.Medicación. Algunos medicamentos, como corticoesteroides, antiinflamatorios no esteroideos o tiazolidinedionas, entre otros, pueden producir retención de líquidos.

7.Insuficiencia cardíaca. Cuando el corazón no bombea la sangre de manera eficiente, la sangre circula más lentamente, se acumula líquido en las venas y aparece la hinchazón en extremidades inferiores y abdomen.

8.Descenso de la cantidad de proteínas. Las proteínas contribuyen a retener el agua en el compartimento intravascular, y su disminución favorece el paso del líquido a los tejidos. Una mala alimentación, alteraciones en el hígado, como la cirrosis hepática o la pérdida de proteínas por el riñón, son algunos de los desencadenantes.

9.Cáncer. Especialmente el de riñón, hígado u ovarios, el cáncer es una de las causas más graves de la aparición de un edema.

Como hemos visto, hay muchos motivos por los que puede aparecer un edema, algunos de ellos graves. En general, padecer retención de líquidos no es una buena señal por lo que es importante acudir al médico para que identifique la causa lo antes posible.

También es importante remarcar que, aunque pueda parecerlo, tomar agua no causará ni agravará esta afección. Por lo tanto, reducir la ingesta de líquido no minimizará el problema. 

Es imprescindible beber suficiente líquido cada día porque contribuye a depurar nuestro organismo y a mantenernos hidratados, esencial para que nuestros órganos puedan funcionar correctamente.

¿Cuáles son los síntomas de la retención de líquidos?

Los síntomas de la retención de líquidos pueden variar dependiendo de su gravedad, pero las personas que sufren edema, presentan algunas de las siguientes señales:  hinchazón, sensación de pesadez, piel tensa, aparición de varices, aumento de peso rápido e inexplicado y sensación de rigidez en las articulaciones. También es habitual una reducción en la frecuencia de las micciones.

7 alimentos diuréticos efectivos para la retención de líquidos

Los alimentos diuréticos son aquellos que favorecen la eliminación de líquidos y toxinas de nuestro organismo, gracias a su capacidad para aumentar la excreción de orina y promover el funcionamiento renal y linfático.

Son alimentos con un alto porcentaje de agua y ricos en fibra, potasio y magnesio, minerales que regulan los niveles de agua de nuestro organismo y mejoran el funcionamiento de los riñones.  Incorporarlos en la dieta es beneficioso para reducir la hinchazón y la incomodidad asociadas con la retención de líquidos y pueden facilitar su control. ¡Te contamos cuáles son!

Hortalizas y verduras de hoja verde 

Las verduras de hoja verde, como la espinaca, la lechuga y el kale, son excelentes opciones para combatir la retención de líquidos. Otras opciones con propiedades diuréticas son el apio, la alcachofa o el calabacín.

Estas verduras son ricas en potasio y bajos en sodio, lo que ayuda a equilibrar los niveles de líquidos en el cuerpo. Además, son bajas en calorías y ricas en nutrientes, lo que las hace ideales para incluir en una dieta saludable.

Frutas cítricas 

Las frutas cítricas, como las naranjas, los limones y los pomelos, son conocidas por su alto contenido de vitamina C y propiedades diuréticas. 

Estas frutas ayudan a aumentar el flujo de orina y promueven la eliminación de líquidos. Además, son ricas en antioxidantes, lo que las convierte en una excelente opción para mantener una buena salud en general.

Pepino 

El pepino es un alimento diurético por excelencia y se compone principalmente de agua. Es bajo en calorías y se caracteriza por su alto contenido de agua, lo que lo convierte en un excelente alimento para combatir la retención de líquidos. 

Además, también es rico en potasio y magnesio, dos minerales esenciales para mantener el equilibrio de líquidos en el cuerpo.

Sandía 

La sandía es una fruta refrescante y deliciosa que puede contribuye a tratar la retención de líquidos. Esta fruta está compuesta en su mayoría por agua y contiene altos niveles de potasio, lo que la convierte en un alimento diurético natural. 

Además, sus propiedades antioxidantes y su bajo contenido en calorías hacen que sea una opción ideal para incluir en una dieta para controlar la retención de líquidos.

Espárragos

Los espárragos son conocidos por sus propiedades diuréticas y desintoxicantes. Son ricos en potasio y bajos en sodio, lo que ayuda a equilibrar los niveles de líquidos en el cuerpo. 

Por otro lado, los espárragos contienen compuestos bioactivos que estimulan la actividad renal y promueven la eliminación de líquidos y toxinas del organismo.

Piña 

La piña es un diurético natural, ayuda a reducir la retención de agua debido a su alto contenido de agua, además resulta ser una excelente fuente de vitamina C.

Té verde 

El té verde contiene teína, que es conocida por sus propiedades diuréticas. También está lleno de antioxidantes, los cuales son beneficiosos para la salud general del cuerpo.

Incorporar alimentos diuréticos a tu dieta diaria puede ser beneficioso para tratar la retención de líquidos. Todos estos alimentos son solo algunos ejemplos, pero no van a hacer milagros. Es importante construir un estilo de vida saludable.

Hábitos de salud para evitar y aliviar la retención de líquidos.

Aunque hemos destacado algunos alimentos concretos, es esencial recordar que una dieta equilibrada y un estilo de vida saludable en general son clave para mantener una buena salud y prevenir muchas afecciones, entre ellas la retención de líquidos.

Dieta mediterránea: basa tu dieta en alimentos frescos, ya que la mayor parte de la ingesta de sodio de nuestra alimentación no proviene de la sal de mesa, sino de los alimentos procesados. Estos alimentos contienen grandes cantidades de sal y favorecen la retención de líquidos. Da protagonismo a frutas y verduras, legumbres, pescado y carnes magras, y cereales integrales.

Además, existen recetas sencillas, rápidas y saludables para incorporar alimentos diuréticos, como, por ejemplo, una macedonia de frutas con piña, pomelo, fresas y naranja. O un refrescante zumo detox de sandía y fresas o de pepino con piña. 

Agua e infusiones: El consumo de agua, caldos e infusiones contribuye a incrementar la diuresis y estimula la eliminación de líquido retenido y toxinas. Especialmente indicadas son las infusiones con té verde, jengibre, canela o cola de caballo.

Combate el sedentarismo: La recomendación general es realizar 30 minutos de ejercicio físico moderado, unas 5 veces por semana. Entre los numerosos beneficios de esta práctica, ayuda en la prevención y la disminución de los edemas. Apúntate esta rutina para tonificar todo el cuerpo y quemar grasa. Podrás ponerla en práctica desde casa y conseguirás activarte, tonificar los músculos y mantenerte en un peso saludable.

Además, si sientes las piernas muy hinchadas, mantenlas elevadas para favorecer el retorno venoso y evita estar sentado durante mucho tiempo. Incluso en el trabajo, levántate de vez en cuando para dar algunos pasos.

Duerme suficiente: descansar entre 7 y 8 horas, permite que el organismo pueda recuperarse completamente y esté en óptimas condiciones. Esto también incluye los niveles de líquidos corporales y las funciones hepática y renal, por ejemplo.

En resumen, mejorar la hinchazón y la sensación de pesadez y cansancio que provoca la retención de líquidos es posible con estos cambios de hábito que te aconsejamos y que te ayudarán, también, a llevar un estilo de vida más saludable en general.